Este año está tocando a su fin, el año 2009, el año europeo de la innovación acaba y ha llegado el momento de desearnos felicidad para estos días y para los 365 que se avecinan a la vuelta de la esquina. La verdad es que ha sido un año complicado, con los líderes mundiales ajetreados buscando soluciones a la crisis e incluso en la última semana les hemos podido ver reunidos en Copenhague "deseándonos" unos próximos buenos años (aunque los hechos hayan quedado en agua de borrajas).
¿No os parece un poco triste?, el desenfreno de avaricia que hace que se inviertan millones de billones de trillones de € y de $ para que luego necesitemos volver a invertir otro montón de millones de billones de trillones de € y de $ para arreglar todo lo que estamos destrozando.
Además, todavía se puede rizar el rizo, mientras los primeros mundos nos dedicamos a gastar para romper y a gastar para tratar de arreglar, los segundos mundos se mueren de hambre.
Llega el año 2010 y aunque venimos de 2 años con apuestas por la innovación (el año 2008 también fué año por la innovación en Euskadi) os vuelvo a desear un innovador año 2010, que aporte soluciones para mejorar el mundo.
¿No os parece un poco triste?, el desenfreno de avaricia que hace que se inviertan millones de billones de trillones de € y de $ para que luego necesitemos volver a invertir otro montón de millones de billones de trillones de € y de $ para arreglar todo lo que estamos destrozando.
Además, todavía se puede rizar el rizo, mientras los primeros mundos nos dedicamos a gastar para romper y a gastar para tratar de arreglar, los segundos mundos se mueren de hambre.
Es el momento de desear..., y yo deseo que el año que viene, cuando celebremos la Navidad no haya 1000 millones de personas pasando hambre, estoy seguro que la innovación también puede ser la puerta para solucionar problemas tan básicos como que los niños se mueran de hambre, estoy seguro que tanta ingeniería genética y tanta nanotecnología puede tener muy buenos usos.
Llega el año 2010 y aunque venimos de 2 años con apuestas por la innovación (el año 2008 también fué año por la innovación en Euskadi) os vuelvo a desear un innovador año 2010, que aporte soluciones para mejorar el mundo.
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